En muchos sentidos, no es una sorpresa ver a Enric Mas en los puestos más altos de la clasificación general de una Vuelta a España, dado que el líder de Movistar ya ha conseguido tres segundos puestos en la general en su Gran Vuelta de casa.
Sin embargo, después de un Tour de Francia tremendamente irregular, en el que comenzó con un rendimiento por debajo de las expectativas pero terminó con una nota mucho más optimista, no estaba claro cómo competiría Mas en su terreno local este agosto.
Hasta ahora, sin embargo, Mas ha demostrado un alto grado de consistencia en la Vuelta 2024. Hasta ahora, solo en una subida clave, el Puerto Ancares, su táctica de atacar al grupo de la general siempre que sea posible, como en Hazallanas en Granada, y seguir de cerca a Primoz Roglič (Red Bull-Bora-Hansgrohe) en las otras subidas importantes no ha funcionado.
Pero a pesar de perder un minuto en Ancares con Roglič, Mas se mantiene tercero en la general, a 3:01 del líder de la carrera, Ben O’Connor (Decathlon AG2R La Mondiale). Y ahora que él y el resto del pelotón de la Vuelta afrontan la siguiente etapa crucial y su final en alto desafiando la gravedad en Cuitu Neru el domingo, en Movistar siguen totalmente convencidos de que el mallorquín todavía puede luchar por la victoria general.
“Estamos en la misma situación, aunque es cierto que tanto Carlos Rodríguez [Ineos Grenadiers] y Mikel Landa [Soudal-QuickStep] “Estamos cada día más fuertes”, dijo el director deportivo de Movistar, Pablo Lastras, a Cyclingnews antes de la etapa 14.
“Roglič ya tuvo días menos buenos en Hazallanas y logró disimularlo, y ahora Mas ha tenido un día menos bueno en Ancares y también logró disimularlo”.
“Pero seguimos con ánimo y esperando a ver qué puede pasar. Tenemos muchas opciones, el equipo va muy bien y seguimos luchando y atacando porque es la única manera de luchar por la victoria final y el podio. Pero no nos olvidemos tampoco de que Ben O’Connor se está defendiendo muy bien”.
Lastras no se sorprende en absoluto de lo bien que ha competido Decathlon, y afirma que sus principales favoritos antes de la carrera eran Rodríguez, Roglič y el equipo francés en general. “Y”, añade con una sonrisa, “Enric, por supuesto”.
Movistar ya tiene en su plantilla un ganador de la Vuelta a España para este año: Nairo Quintana, que se llevó la carrera en 2016.
Según Lastras, los repetidos accidentes y las lesiones posteriores han impedido que Quintana compita de forma constante y alcance su nivel habitual. Pero el veterano colombiano sigue desempeñando un papel fundamental en el equipo de la Vuelta 2024.
“Le da mucha confianza, serenidad y tranquilidad al grupo y eso es fundamental. Todo director tiene que tener un confidente clave en el equipo y ese hombre aquí es Nairo”, explica Lastras.
“Hay que recalcar que Nairo está aquí por el equipo, no por sí mismo, y estamos muy contentos con él. El viernes, por ejemplo, trabajó duro en un terreno más llano que no le venía bien y eso resume lo bien que está corriendo, demuestra su actitud práctica, que al final importa más que el aspecto físico”.
Curiosamente, Lastras confirma que una filosofía optimista similar es la que está detrás del renacimiento de Mas en la Vuelta. O como dice Lastras: “Desde el Tour es un corredor diferente, tiene un tipo diferente de dinámica que lo impulsa”.
La naturaleza exacta de esa dinámica o actitud diferente hacia las carreras es a la vez sencilla y complicada de alcanzar.
“Normalmente no me gusta hablar de mí mismo como piloto, pero tengo que decir que a los 31 años algo pasó, mi filosofía de trabajo cambió de repente, de la noche a la mañana. Empecé a disfrutar sufriendo sobre la bicicleta, disfrutaba del sol, de la lluvia, de las carreras en general. Incluso después de la caída, seguía disfrutando. En todos los aspectos, estaba en una situación mucho mejor”.
Lo que desencadenó el cambio en el caso Lastras fue una conversación sincera con Eusebio Unzue, director deportivo de Caisse d’Epargne, antiguo patrocinador del equipo Movistar.
La moraleja detrás del cambio de actitud de Mas -y su regreso en 2007- es una que Lastras cree que es bueno transmitir a las generaciones más jóvenes de corredores, que a menudo compiten en niveles altos desde una edad muy temprana.
“Llegan súper preparados, pero como pilotos no disfrutan de lo que hacen. Pero el día que empiecen a disfrutar de las carreras les irá mejor, porque todo lo demás les va bien, desde su capacidad de recuperación hasta su capacidad dentro de la competición”.
“En mi caso, en 2007 gané una etapa del Benelux Tour, después gané la Vuelta a Andalucía e incluso conseguí una etapa y un día de líder en la Vuelta a España en 2011. Pero como digo, no se trata de ganar, se trata de disfrutar. Eso es lo importante”.