Tierra Hodges fue el máximo anotador del Newcastle con 21 puntos y les ayudó a recuperarse de un comienzo inestable.
Los menos favorecidos parecían estar en peligro de ser derrotados después de que Londres tomara una ventaja de 9-0, con el escolta estadounidense Meyers como protagonista.
Eso llevó al entrenador de los Eagles, Matt Newby, a pedir un tiempo muerto temprano, después de lo cual su equipo se metió en el juego.
Redujeron la ventaja de Londres a 14-6, con Hodges anotando todos los puntos de su equipo, y perdían 18-14 al final del primer cuarto.
El déficit se redujo brevemente a sólo dos puntos, pero Londres respondió con fuerza, adelantándose 46-28 al final del segundo cuarto y, a pesar de los triples consecutivos de Chloe Gaynor, abriendo una ventaja de 24 puntos en el tercero para lideraban 74-50 de cara al último cuarto.
Hay que reconocer que Newcastle no se rindió y continuó atacando agresivamente, pero el abismo de clase permaneció claro. La puntuación de Londres es la más alta jamás obtenida en una final de la WBBL.